Los trastornos de lenguaje oral, como su nombre lo dice, constituyen “una alteración en la adquisición o desarrollo del lenguaje, lo cual dificulta la comunicación eficaz con los iguales” , por lo que representan un gran obstáculo para el desarrollo integral de las personas, pues es a través del lenguaje que éstas logran la adquisición de aprendizajes, interactúan con su entorno y, por ende, se desenvuelven personal y socialmente.

Se debe saber que los trastornos en el lenguaje se presentan comúnmente en la población infantil (y tienen mayor incidencia en hombres que en mujeres) y que éstos abarcan desde simples dificultades de articulación de fonemas hasta graves problemas de comunicación.

En este sentido, es necesario prestar especial atención a los signos y síntomas que identificamos en los niños. Para esto,  debemos conocer que los trastornos del lenguaje se encuentran clasificados de acuerdo a tres niveles:

NIVEL 1. Problemas en la voz. En este nivel se encuentran principalmente las disfonías, las cuales son alteraciones que afectan la intensidad, tono o timbre de la voz.

NIVEL 2. Problemas en el habla. Los niños que presentan dificultades en este nivel, muestran problemas en su articulación o fluidez verbal, es decir, suelen tener complicaciones al momento de emitir algún sonido o mantener un ritmo apropiado al hablar.
Dificultades en la articulación.  Entre las principales alteraciones de los sonidos del lenguaje se encuentran:

  • Dislalias. Las cuales se distinguen debido a que  los niños presentan dificultad para pronunciar correctamente determinados fonemas (/r/, /s/, /d/, etc.).  Éstas a su vez están clasificadas en dislalia evolutiva (problema de articulación debido a un inadecuado desarrollo de aparato fonoarticulatorio),dislalia audiógena (mala pronunciación debido a un déficit auditivo) dislalia orgánica o disglosia (mala articulación a consecuencia de una malformación en labios, lengua,  paladar, etc.) y dislalia funcional ( utilización incorrecta de los órganos que intervienen en la articulación del lenguaje debido a diversas causas que van desde insuficiente control psicomotriz hasta deficiencia intelectual).
  • Disartrias. Este problema se presenta en los niños que tienen dificultad para articular correctamente debido a una lesión en su sistema nervioso y se puede apreciar a través de la estabilidad de su función respiratoria, en el sonido de su voz, en la forma en que emiten alguna palabra (barrida, borrosa, etc.) y por supuesto en su nivel de articulación.

Dificultades en la fluidez verbal. En este tipo de alteraciones se encuentra la disfemia o tartamudez, la cual se  puede apreciar principalmente en el ritmo  del habla que presentan los niños, al notar si éstos se expresan de manera bloqueada (tartamudez tónica), suelen repetir alguna sílaba (tartamudez clónica)  y/o prolongan algún sonido de las palabras que emiten.

NIVEL 3. Problemas en el lenguaje. En este sentido, las dificultades ya no sólo se localizan en la forma de articulación o expresión vocal,  sino que constituyen también problemas para comprender y establecer procesos comunicativos.
En este nivel se encuentra los trastornos específicos del lenguaje, los cuales se caracterizan de la siguiente manera:

  • Retraso Simple del Lenguaje. Aquí se identifica a los niños que presentan problemas en la articulación de algunos fonemas y un déficit de tipo fonológico-sintáctico debido a diversas causas que van desde la sobreprotección o abandono familiar, hasta una causa genética.
  • Disfasias. Estas se caracterizan por una dificultad del niño en la adquisición o desarrollo del lenguaje sin causas neurológicas observables tales como lesión cerebral o retraso mental.
  • Afasias.Éstas, al contrario de las disfasias, son problemas en el lenguaje caracterizados principalmente por  un daño neurológico producido después de que el niño haya adquirido el lenguaje.

Como se puede observar, son diversas las causas y características de los trastornos o dificultades del lenguaje, cada uno de ellos tiene especificidades que no se deben pasar por alto al momento de la detección y tratamiento de los mismos, pues de ello depende una acertada intervención.

Señales para identificar su presencia

Como profesionales y padres de familia, debemos estar alerta para poder identificar oportunamente cualquier alteración en la adquisición y desarrollo del lenguaje de los niños.

  • Primeramente, debe saberse que la adquisición del lenguaje es un proceso paulatino que tiene secuencias generalmente predecibles y que comienza desde los primeros meses de vida.
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