Los comportamientos característicos pueden ser:

  • Inquietud o movimiento constante
  • Deambular
  • Hablar en exceso
  • Dificultad para participar en actividades silenciosas, como la lectura

La hiperactividad no es fácil de definir y a menudo depende del observador. El comportamiento que parece excesivo para una persona puede no parecer excesivo para otra. Sin embargo, comparados con otros, ciertos niños claramente son más activos, lo cual se puede convertir en un problema si esta situación interfiere con el desempeño escolar o la capacidad para hacer amigos.
A menudo la hiperactividad se considera más un problema para las escuelas y los padres que para el niño. Sin embargo, muchos niños hiperactivos son infelices e incluso depresivos. El comportamiento hiperactivo puede llevar a que el niño sea blanco de acoso escolar (bullying) o que se le dificulte conectarse con otros niños. El trabajo escolar puede ser más difícil. Los niños que son hiperactivos frecuentemente reciben castigos por su comportamiento.
El movimiento excesivo (comportamiento hiperquinético) suele disminuir a medida que el niño crece y puede desaparecer por completo en la adolescencia.

Causas
  • Trastorno de hiperactividad con de déficit de atención (THDA)
  • Trastornos cerebrales o del sistema nervioso central
  • Trastornos emocionales
  • Hipertiroidismo
Cuidados en el hogar
Un niño que normalmente es muy activo suele responder bien a instrucciones específicas y a un programa de actividad física regular. Por otro lado, un niño hiperactivo tiene dificultades para seguir instrucciones y controlar los impulsos. 
¿Cuándo contactar a un Especialista?
  • El niño parece ser persistentemente hiperactivo.
  • El niño es muy activo, agresivo e impulsivo y tiene problemas para concentrarse.
  • El nivel de actividad del niño está causándole dificultades sociales o con el desempeño escolar.
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